El amor después de Fito Paez en el Zócalo CDMX

El músico argentino dejó el corazón en la plancha del zócalo de la CDMX, en una actuación diferente a lo que estamos acostumbrados a verle. Aquí la reseña.

Es el primer sábado “normal” de 2025 en la CDMX. Ya pasaron las fiestas de navidad y año nuevo. En el zócalo la parafernalia festiva se ha ido, pero no la fiesta. Hoy es el primer concierto del año en la plaza más importante de México. Son las 4 de la tarde y mucha gente ya está esperando que caiga la noche para que la música gobierne este gran espacio. El encargado de llevar la ceremonia musical es el músico argentino Fito Paez, quien viene a pagar una deuda con el público chilango.

Foto concierto Fito Paez Zócalo CDMX.
Foto: Cultura CDMX.

La cancelación del concierto

El concierto de hoy 18 de enero de 2025, estaba programado para el 07 de septiembre de 2024. Han pasado ya varios meses desde que se supo la noticia de que el también director de cine y escritor, Fito Paez, tuviera un accidente en su casa que le costó algunas costillas rotas y la cancelación de sus conciertos pendientes. Esto acrecentó entre sus seguidores las ganas de verlo en vivo para la celebración número 40 de su primer disco “Del 63” y 30 de su legendario disco “Circo Beat”. La fecha llegó y vaya que si valió la pena.

El escenario minimalista

El zócalo de la CDMX se caracteriza por ser imponente aún sin un escenario que lo ocupe. Incluso sin las luces que suelen colocarle dependiendo la temática en turno del calendario. Esta ocasión para el show de Fito Paez colocaron de fondo una gran pantalla de Leds que estaba al centro de otras dos pantallas casi de la misma longitud horizontal. Esto último es un clásico de grandes conciertos, sin embargo en esta ocasión delante de las pantallas laterales se dispuso de un pasillo a la usanza de terraza para que Fito recorriera de punta a punta el escenario y saludara a las personas de los costados teniendo como fondo inmediato las mencionadas pantallas laterales. La selección de imágenes y luz fueron en general de corte minimalista que le daba una personalidad sobria a todo el conjunto en escena. Y es que no es para menos. El rockero argentino ya está consagrado como artista.

Foto concierto Fito Paez Zócalo CDMX.
Foto: Cultura CDMX.

El repertorio legendario

Cuando llevas 40 años lanzando discos escoger el repertorio para un show y una gira que postergaste por salud supongo que ha de ser fácil desde el punto de vista del espectador: tratas de tocar todos tus éxitos. Lo malo y difícil es que tendrás que dejar algunos fuera y tocar algunos que están en el baúl de los recuerdos. En este caso todo fluyo naturalmente. “El amor después del amor” sonó como canción insignia del evento. Un pad de cuerdas anuncia la llegada del artista, luego la secuencia de batería nos conecta de lleno con el show y la canción automáticamente enciende los ánimos. El maestro tocó todos sus éxitos en lo que le dieron de tiempo. “11 y 6”, “Dar es Dar” y “Rodar” son piezas que siempre abrigan sus actuaciones. “Tumbas de la gloria” y “A lado del camino” fueron un regalazo para su fans. Y para despedir, luego de “Circo Beat” y “Yo vengo a ofrecer mi corazón” se despidió del público con “Mariposa Technicolor” y una versión conmovedora de “Dale Alegría”. Sin duda un concierto completo que nos llevó por la trayectoria del rosario de su misma mano. Aquí cabe señalar que los arreglos nuevos, frescos y minimalistas le dieron un aire de señorío a las canciones que confirmó la llegada al panteón de la inmortalidad musical latinoamericana de Fito Paez.  Todo lo anterior gracias al combo y a los músicos que seleccionó para esta gira que suena más madura que todas las demás que le he escuchado.

Foto concierto Fito Paez Zócalo CDMX.
Foto: Cultura CDMX.

Fito el artista

Los fans y espectadores que  están familiarizados con el artista, su música y su forma de ser en el escenario quizá parezca una gran sorpresa (para bien) que el músico no sólo se mostró mucho más cálido con el público, sino que todo el tiempo llevó consigo un aura etérea de sosiego y felicidad. Su vestuario era digno de un divo, holgado, con capa y con colores encendidos. Con pose de señor y actitud de mago logró que entre lo sobrio y extravagante del escenario, la excelsitud de los músicos, lo impecable de los arreglos minimalistas y su trato con el público la noche se convirtiera en una ceremonia de confirmación de su estrellato en la música latinoamericana.

Foto concierto Fito Paez Zócalo CDMX.
Foto: Cultura CDMX.

El público  del zócalo CDMX       

Como ya es costumbre en los conciertos del zócalo de la CDMX, la noche se convierte en una fiesta pública. Siempre podemos encontrar público de todas las edades y raleas que se congrega para recibir a quien se presente en ese recinto. Todos van con la confianza de que lo que se presente es digno de ese escenario. Así fue como el venerable escuchó atento a Juguete Rabioso y a Rey Pila, las agrupaciones abridoras de Fito Paez. El zócalo estuvo lleno, pero aún así había espacio entre los asistentes y se podía ver desde lejos sin el riesgo de tumultos. El volumen y la mezcla de audio permitieron que los presentes disfrutaran sin contratiempos el show aún cuando no fueran fans de siempre. El espectáculo dejó a todos con buen sabor de boca…

Foto concierto Fito Paez Zócalo CDMX.
Foto: Cultura CDMX.

El amor después de Fito Paez

El concierto de ayer fue más que un espectáculo masivo en el zócalo de la CDMX. Fito Paez nos mostró que puede transformarse una vez más en un artista nuevo. Presenciamos la apoteósis de su madurez como artista. Ayer dominó el escenario, pero no como en otras épocas que nos brindaba dosis de virtuosismo en los sintetizadores mientras su energía recorría el escenario para meternos a su rock. Ayer sólo abrió los brazos y dejo que su música permeara las 80 mil almas reunidas en el corazón de la ciudad (según el gobierno de la CDMX) con una sutileza que sólo alguien de su talla puede lograr. La energía se convirtió en amor. En el amor después de Fito Paez.

Foto concierto Fito Paez Zócalo CDMX.
Foto: Cultura CDMX.